Declaración de la Directora Ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, sobre los niños y niñas de Sudán en riesgo de hambruna

NUEVA YORK, 8 de marzo de 2024 – “La brutal guerra que se libra en Sudán está llevando al país a la hambruna y a una catastrófica pérdida de vidas, especialmente entre la población infantil. En el contexto de la que ya es la mayor crisis de desplazamiento infantil del mundo, los niveles de desnutrición grave entre los niños y las niñas de corta edad están superando las peores previsiones, y hay además brotes de cólera, sarampión y malaria.

“También hay pruebas que muestran un aumento de las muertes infantiles por desnutrición, especialmente entre los niños y niñas desplazados. En enero de 2024, una evaluación realizada por Médicos Sin Fronteras en el campamento de Zamzam, en Darfur del Norte, reveló que la desnutrición y la mortalidad estaban por encima de los niveles de emergencia. Por otra parte, las pruebas masivas del estado nutricional de la población infantil llevadas a cabo por UNICEF y sus aliados en febrero de 2024 en los estados de Darfur Central y Gezira refleja niveles alarmantes de emaciación infantil. También en febrero, el Ministerio de Salud del estado de Darfur Occidental confirmó el fallecimiento de 14 niños y niñas por desnutrición, unas muertes que se produjeron en sus casas.

“Esto está ocurriendo justo antes del periodo anual de escasez, que comienza en las próximas semanas y en el que la situación de la desnutrición no hará sino empeorar.

“En 2023, UNICEF constató una cifra récord de ingresos de niños y niñas que necesitaban tratamientos de emergencia contra la desnutrición aguda grave –la forma más letal de malnutrición– en zonas donde la organización y sus aliados podían acceder. Sin embargo, en lugares de más difícil acceso, solo el 37% de los aproximadamente 120.000 niños y niñas con desnutrición aguda grave recibieron los tratamientos esenciales que necesitaban, la gran mayoría antes de que el conflicto estallara en abril.

“Este año, casi tres cuartas partes de la abrumadora cifra de 3,7 millones de niños y niñas que necesitan apoyo nutricional urgente viven en 135 poblaciones consideradas de difícil acceso. Más de la mitad de los niños y niñas que padecen desnutrición aguda grave se encuentran en Darfur, Jartum y Kordofán, que incluyen zonas donde la ayuda debe suministrarse en los frentes de batalla o las fronteras.

“Las comunidades están al borde de la hambruna porque se nos impide llegar a muchos de los niños y niñas, mujeres y familias que necesitan ayuda. Esto es inaceptable. Tenemos que actuar de inmediato para ampliar masivamente los esfuerzos destinados a identificar a los niños y a las mujeres en situación de riesgo y proporcionarles alimentos y cuidados vitales, entre ellos, suministros nutricionales esenciales, vacunas y agua potable.

“Para lograrlo, es necesario que las partes en conflicto garanticen un acceso humanitario rápido, sostenido y sin trabas, tanto dentro de las líneas de conflicto en Sudán como en las fronteras con los países vecinos. En Chad se ha proporcionado una fuente de sustento vital para las comunidades de Darfur, y el acceso a través de su frontera sigue siendo fundamental, al igual que el acceso por Sudán del Sur. Necesitamos también que las redes de telecomunicaciones funcionen adecuadamente para poder identificar y derivar a los niños y niñas en situación de riesgo y para que los aliados humanitarios puedan comunicar las necesidades más apremiantes.

“Asimismo, necesitamos una movilización masiva de recursos por parte de la comunidad internacional de aquí a finales de marzo, de forma que los aliados humanitarios obtengan los suministros y las capacidades sobre el terreno con la antelación suficiente para contener el desastre humanitario que se avecina. Solo UNICEF necesita urgentemente 240 millones de dólares para su plan de respuesta de prevención de la hambruna.

“Los niños y las niñas no pueden esperar a que el mundo siga deliberando sobre si hay hambruna en Sudán. Necesitan ayuda urgente cuanto antes”.

#####