El número de niños y niñas muertos en Cisjordania, incluida Jerusalén oriental, alcanza niveles sin precedentes

AMMÁN, 28 de diciembre de 2023 – “Este año ha sido el más mortífero que se recuerda para los niños y niñas de Cisjordania, incluida Jerusalén oriental, ya que la violencia relacionada con el conflicto ha alcanzado niveles sin precedentes.

“En las últimas 12 semanas han muerto 83 niños y niñas, más del doble que en todo 2022, en medio de un aumento de las operaciones militares y policiales. Más de 576 han resultado heridos y, según los informes, otros han sido detenidos. Además, las restricciones en la circulación y el acceso han empeorado gravemente la situación en Cisjordania.

“Mientras el mundo contempla horrorizado la situación en la Franja de Gaza, los niños y niñas de Cisjordania sufren su propia pesadilla. Vivir con una sensación casi constante de miedo y dolor es, por desgracia, demasiado común para los niños y niñas afectados. Muchos de ellos han indicado que el temor se ha convertido en parte de su vida cotidiana, y que tienen miedo incluso de caminar para ir a la escuela o jugar fuera de sus hogares debido a la amenaza de tiroteos y otros actos de violencia relacionados con el conflicto. UNICEF está extremadamente preocupado por el derecho de los niños y niñas de Cisjordania, incluido Jerusalén oriental, a la seguridad y la protección, y por su derecho inherente a la vida.

“Los niños y niñas que viven en Cisjordania, incluido Jerusalén oriental, han estado sufriendo una violencia despiadada durante muchos años; sin embargo, la intensidad de esa violencia ha aumentado dramáticamente desde los horribles ataques del 7 de octubre. La violencia relacionada con el conflicto ha costado la vida de 124 niños y niñas palestinos y de 6 niños y niñas israelíes desde el comienzo de 2023.

“Las graves violaciones contra los niños y niñas, en particular los asesinatos y las mutilaciones, son inaceptables. UNICEF insta a todas las partes a cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional de los derechos humanos y a proteger a los niños y niñas de la violencia relacionada con el conflicto y preservar su derecho más básico, que es simplemente el derecho a estar vivos. Los niños y niñas nunca deben ser el blanco de la violencia, sin importar quiénes sean o dónde se encuentren. Poner fin a la violencia recurrente es la mejor manera de garantizar que los niños y niñas puedan crecer en paz y seguridad.

“El sufrimiento de los niños y niñas de Cisjordania, incluido Jerusalén oriental, no debe convertirse en un trasfondo del conflicto actual, ya que forma parte de él”.

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